«Estad preparados para la acción, sed sobrios, y esperad por completo en la gracia que se os traerá en la revelación de Jesucristo».
1 Pedro 1: 13, RV95.
Se dice que una persona está en estado de ebriedad cuando ha ingerido una dosis alta de alcohol, de manera que su juicio está afectado y no puede pensar con claridad. Su movilidad y su habla también se ven afectados, debido a que su cerebro está intoxicado con la bebida. Aunado a esto, todo borracho se queda dormido.
¿Dejarías a tu bebé en manos de una persona en estado de ebriedad? ¿Le pedirías que te llevara en su automóvil a tu casa? ¿Lo dejarías dar un discurso en una reunión importante? Puedo intuir que tu respuesta es negativa. No se pueden confiar tareas de vida o muerte o de suma importancia a una mente imposibilitada por el alcohol. Es por eso que, el apóstol Pedro, hace un énfasis especial en el hecho de que debemos estar sobrios y velando.
La palabra griega nefó es la que se utiliza en el pasaje bíblico de hoy para referirse a ser «sobrios». Pedro menciona tres veces en su primera Epístola la palabra nefó para hacer una metáfora de la vida espiritual. Veamos sus significados:
1) En 1 Pedro 1: 13, RVC: «Preparen su mente para la acción y estén atentos»;
2) 1 Pedro 4: 7, RVC: «Pórtense juiciosamente»;
3) 1 Pedro 5: 8, RVC: «Sean prudentes». Estar atentas para la acción; portarnos juiciosamente; ser prudentes, esto es ser sobrias. Esto es lo que el apóstol quiere dejar indeleblemente grabado en nosotros. Todas estas son cualidades que no encontramos en una persona ebria.
Es muy importante recalcar que, seguido de la sobriedad, Pedro emplea el verbo «velad» o «esperad por completo», en modo imperativo. ¿De dónde toma el discípulo la expresión «velad»?Jesús se lo dijo a él antes de su prueba, pero él no lo hizo. El resultado fue que reprobó ver Mateo 26: 41. Como Pedro pasó el trago amargo de no estar sobrio ni velando, quiso evitarnos pasar por ese oscuro valle.
Querida amiga, necesitamos estar sobrias en nuestro caminar cristiano para no caer en las trampas y en los engaños del enemigo. El tiempo de conocer a nuestro amado Jesús está más cerca que ayer, y debemos estar sobrias para su encuentro. La buena noticia es que una mente preparada para la acción, atenta, juiciosa y prudente, estará lista para vivir en las mansiones celestiales.
Posdata: Feliz al estar sobria.
Lecturas Devocionales para Damas 2025
“MÁS FELIZ EN CRISTO»
Por: Sayli Lucía Guardado Chan
Colaboradores: Milenia de la Rosa y Silvia García
