Por mucho que argumenten, erróneamente, quienes se oponen a la observancia del sábado, el séptimo día de la semana, diciendo que era solo para los judíos (el sábado fue apartado y santificado en el Edén [ver Gén. 2: 1-3]); o argumenten, también erróneamente, que los judíos oyeron hablar del sábado por primera vez en el Sinaí (los judíos ya lo observaban antes del Sinaí [ver Éxo. 16: 22-29]), no hay duda de que ese día estaba muy presente en la vida del pueblo hebreo desde el principio.
Lee Éxodo 35: 1 al 3. ¿Qué verdad fue reiterada aquí al pueblo en el contexto de la construcción del Santuario?
El sábado de la iglesia del Antiguo Testamento transmite un mensaje múltiple. Su esencia puede ser resumida en cinco puntos cruciales:
- Dios es el Creador. La Biblia comienza con esta asombrosa y fundamental proclamación (Gén. 1: 1). El sábado es el memorial vívido de la creación realizada por Dios (Gén. 2: 2, 3; Éxo. 20: 8-11). De esta verdad, que Dios es nuestro Creador, se desprenden todas las demás verdades bíblicas.
- El Mesías vendrá. Esta esperanza se centra en la promesa de Dios acerca de la Simiente, del Descendiente que vencería a la serpiente (Satanás) y pondría fin al mal. 3. Dios establecerá su reino, cuyo anticipo es el sábado.
- La salvación viene del Señor, y el pueblo de Dios da testimonio de que Dios es su Salvador y Redentor, y que la salvación es resultado solo de su gracia.
- Dios es el juez último de todas las personas. Quienes lo desafían persistentemente y lo rechazan no vivirán para siempre, pero él concede vida eterna por pura gracia a quienes lo aceptan como su Señor y Salvador.
Según un dicho judío: «El sábado guardó más a Israel de lo que Israel guardó el sábado». Aunque como adventistas quizá no lo expresemos de la misma manera, ¿Qué papel importante cumple el sábado en la vida de nuestra familia eclesial?
Lección de Escuela Sabática para Adultos 2025
3er. Trimestre 2025 «EL EXODO: VIAJE A LA TIERRA PROMETIDA»
Lección 13: «EL TABERNÀCULO»
Colaboradores: Esmeralda Bermudes y Karla González