Devocional Vespertino 2024 Para el: 23 abril
«Vivan sin ambicionar el dinero.
Más bien, confórmense con lo que ahora tienen». Hebreos 13: 5 RVC
Acán había albergado la codicia y el engaño en su corazón, al punto de que sus percepciones del pecado se oscurecieron y fue víctima fácil de la tentación. Los que se aventuran a acariciar una vez un pecado conocido caerán más fácilmente la segunda vez. La primera transgresión abre el camino al tentador, que gradualmente destruye toda resistencia y toma posesión completa de la ciudadela del alma. Acán había escuchado las advertencias frecuentemente repetidas contra el pecado de la codicia. La ley de Dios, clara y positiva, había prohibido el robo y todo engaño, pero él continuó acariciando el pecado. Como no fue descubierto y reprendido abiertamente, se hizo más osado; las advertencias tuvieron cada vez menos efecto en él, hasta que su alma estuvo sujetada por cadenas de oscuridad.— Comentario bíblico adventista, t. 2, p. 991.
Por el pecado de un hombre, vergüenza, derrota y muerte cayeron sobre Israel. Se les retiró la protección que había cubierto sus cabezas en el tiempo de la batalla. Los diversos pecados que profesos cristianos acarician y practican traen el enojo de Dios sobre la iglesia. [….]
La influencia que más debe temer la iglesia no es la de los opositores abiertos, infieles y blasfemos, sino la de los miembros profesos de Cristo que son inconsecuentes. Estos son los que impiden la llegada de las bendiciones del Dios de Israel y traen debilidad a la iglesia, una mancha que no es fácil de quitar.
El cristianismo no es solo para ser lucido el sábado y desplegado en el templo; es para cada día de la semana y para cada lugar. Sus exigencias deben reconocerse en el taller, en el hogar, y en las transacciones comerciales con los hermanos y con el mundo. […]
Mejor es morir que pecar, mejor es necesitar que defraudar, mejor es pasar hambre que mentir. Que todos los que son tentados se enfrenten a Satanás con estas palabras: «Bienaventurado todo aquel que teme a Jehová, que anda en sus caminos. Cuando comas el trabajo de tus manos, bienaventurado serás y te irá bien» (Salmo 128: 1, 2).— Testimonios para la iglesia, t. 4, pp. 485, 486.
www.meditacionesdiarias.com
https://www.facebook.com/meditacionesdiariass
https://play.google.com/store/apps/details?id=com.meditacionesdiarias.mobile
Devocional Vespertino para 2024.
«Conflicto y Valor»
Por: Elena G de White
Colaboradores: José Sánchez y Silvia García
Feb 17, 2025 0
Feb 17, 2025 0
Feb 17, 2025 0
Dic 30, 2024 0
Dic 29, 2024 0
Dic 28, 2024 0
Dic 27, 2024 0