Enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado. Y yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo (Mateo 28:20).
El Evangelio de Mateo termina con esta poderosa declaración del Cristo resucitado: «Y yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo” (Mateo 28:20). Relacionado con este pasaje, G. Campbell Morgan, el famoso evangelista del siglo pasado, cuenta algo que le sucedió mientras lo compartía con un grupo de personas.
Cuando comenzó su peregrinaje cristiano, cada semana Morgan solía visitar a un grupo mujeres para leer la Biblia con ellas. Cuando llegó al final del Evangelio de Mateo, leyó: «Y yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”. Entonces levantó la mirada y les preguntó a las damas: «¿Verdad que esta es una promesa maravillosa?”. Para su sorpresa, una de ellas le dijo: «Joven, eso no es una promesa, ¡es una realidad!”. *
¿Una realidad? Sí, porque Jesús garantizó su presencia a todos los que tomen parte activa en la obra de enseñar todo lo que él nos ha mandado.
¡Y Campbell lo estaba haciendo en ese mismo momento! Mateo comenzó su Evangelio hablando de la presencia de Dios con nosotros y lo concluye aludiendo a lo mismo, es decir, Dios está con nosotros de principio a fin. Él nunca nos deja abandonados a nuestra propia suerte.
La versión que hemos usado aquí de Mateo 28:20 pasa por alto un elemento importante del texto griego. La frase traducida «Y yo” encierra un significado más profundo del que recoge la Reina-Valera de 1995. El vocablo «y”, en griego idou, es una partícula que los escritores usaban para agregarle énfasis a una declaración. Es como si Jesús dijera: «Presten atención, no tengan dudas y no olviden lo que les voy a decir”. La Nueva Versión Internacional captó mejor este sentido original al traducir: «Y les aseguro que estaré con ustedes”. Lo mismo se puede decir de la Nueva Biblia de las Américas: «Y ¡recuerden! Yo estoy con ustedes”.
Nuestro Señor quiere que tengamos la seguridad, que nunca olvidemos, que él estará con nosotros todos los días hasta que el mundo llegue a su final. Lamentablemente, como sabemos, las cosas durante los últimos días «irán de mal en peor» (2 Timoteo 3:13), por lo que es vital para nosotros tener la certeza de que Dios seguirá a nuestro lado. Más que una promesa, tomémoslo como lo que es: una indiscutible realidad. Él está con nosotros. Él está contigo.
Warren W. Wiersbe, The Wiersbe Bible Commentary, NT (Colorado Sprint: David C. Cook,2007), p.87.
Tomado de: Lecturas Devocionales para Adultos 2023 «YO ESTOY CONTIGO» Promesas Bíblicas para vivir confiado Por: VLADIMIR POLANCO Colaboradores: Silvia Garcia y Alexandra Pérez