Verá el fruto de la aflicción de su alma y quedará satisfecho; por su conocimiento justificará mi siervo justo a muchos, y llevará sobre sí las iniquidades de ellos. (Isaías 53:11).
La revista The Atlantic realizó la siguiente pregunta a sus lectores: «¿Cuál ha sido el crimen que mayor impacto ha tenido en el curso de la historia?”. Uno de ellos contestó que había sido el asesinato del archiduque de Austria, Francisco Fernando, el crimen que desencadenó la Primera Guerra Mundial y sentó las bases para la Segunda Guerra Mundial. Otro respondió que el Motín del Té. En 1773 un grupo de colonos tiraron por la borda los cargamentos de los barcos de la Compañía de las Indias Occidentales; ese crimen hizo que los ingleses endurecieran sus leyes contra las colonias británicas de Norteamérica, lo cual provocó que las colonias americanas se revelaran y que se fundaran los Estados Unidos de América.* Sin embargo, es el capítulo 53 de Isaías el que nos narra las atrocidades del crimen más espantoso que alguna vez se haya cometido en este planeta; un crimen que cambió la historia del universo.
De acuerdo con el profeta, Jesús fue desechado, despreciado, llevó nuestras enfermedades y sufrió nuestros dolores, “fue herido por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados. Por darnos la paz, cayó sobre él el castigo, y por sus llagas fuimos nosotros curados” (versículo 5). El apóstol Pedro declara: «Porque Cristo mismo sufrió la muerte por nuestros pecados, una vez para siempre. Él era inocente, pero sufrió por los malos, para llevarlos a ustedes a Dios” (1 Pedro 3:18, DHH). ¡Él sufrió siendo inocente! Y sufrió para que los malos tuviéramos acceso al trono de Dios. Esa muerte injusta nos abrió el camino de la vida a los que merecíamos la muerte. Y al final de Isaías 53 se nos asegura que ese Siervo sufriente “vera el fruto de la aflicción de su alma y quedará satisfecho: por su conocimiento justificará mi siervo justo a muchos, y llevará sobre sí las iniquidades de ellos” (versículo 11).
Sí, Jesús fue la Víctima del crimen que más ha impactado nuestra historia: aceptó sufrir la muerte más injusta, el dolor más espantoso, el sufrimiento más indecible; pero no fue en vano, él quedará satisfecho al ver el cambio que su muerte ha producido en nuestra vida: quedará satisfecho si aceptamos su sacrificio y decidimos vivir con él en el reino de los cielos.
«What crime most changed the course of the history», The Atlantic (octubre de 2017), p. 100.
Tomado de: Lecturas Devocionales para Adultos 2023 «YO ESTOY CONTIGO» Promesas Bíblicas para vivir confiado Por: VLADIMIR POLANCO Colaboradores: Silvia García & Alexandra Pérez