Satanás controla la mente del que controla la de otros
Abogar por la ciencia de la cura mental es abrir una puerta por la cual Satanás entrará para posesionarse de la mente y el corazón. Satanás controla tanto la mente que se somete para ser controlada por otra, como la mente que ejerce ese control. Quiera Dios ayudarnos a comprender la verdadera ciencia de la edificación en Cristo, nuestro Salvador y Redentor. —Nuestra Elevada Vocación, 111 (1901).
Satanás no puede dañar la mente de quienes no se entregan a él
Los intereses más vitales para ustedes, individualmente, están bajo su propio cuidado. Nadie puede dañarlos sin su consentimiento. Todas las legiones satánicas no pueden hacerles daño, a menos que abran su alma a las artes y dardos de Satanás. Nunca sobrevendrá su ruina a menos que ustedes consientan. Si no hay contaminación de su mente, toda la contaminación que los rodea no puede mancharlos. — Nuestra Elevada Vocación, 96 (1885).
Satanás no puede disponer de la mente o el intelecto, a menos que se lo entreguemos. —Comentario Bíblico Adventista 6:1105 (1893).
No es la fe de Jesús
La aceptación de la verdad de origen celestial pone la mente en sujeción a Cristo. Entonces la salud del alma, que proviene de recibir y seguir los principios puros, se revela en palabras y acciones de justicia.
La fe que conduce a esto no es la fe que cree en el control de una mente sobre otra, hasta el punto de que alguien haga la voluntad de otra persona. Los miembros de iglesia que confían en esta ciencia pueden ser considerados sanos en la fe, pero esa fe no es la de Jesucristo. La fe de ellos es una fe en las obras que Satanás está haciendo. Está presentando gigantescos errores, y engaña a muchos mediante los milagros que hace. Él hará cada vez más esta obra. Una iglesia sana está compuesta por miembros sanos, por hombres y mujeres que tienen una experiencia personal en la verdadera piedad. —Carta 130, 1901.
MENTE CARÁCTER Y PERSONALIDAD TOMO #2 SECCIÓN #15: FALSOS SISTEMAS DE CURACIÓN Capítulo 78: CONTROL DE UNA MENTE SOBRE OTRA Por: Elena G De White Colaboradores: Liseth Orduz & América Lara