A la par que se predica el evangelio, hay agentes que trabajan y que solo son intermediarios de los espíritus mentirosos. Muchos tratan con ellos por simple curiosidad, pero al ver pruebas de que obra un poder más que humano, quedan cada vez más seducidos hasta que llegan a estar dominados por una voluntad más fuerte que la suya. No pueden escapar de este poder misterioso. Las defensas de su alma quedan derribadas. No tienen vallas contra el pecado. Nadie sabe hasta qué abismos de degradación puede llegar a hundirse una vez que rechazó las restricciones de la Palabra de Dios y de su Espíritu. —El Deseado de Todas las Gentes, 223 (1898).
Ciencia y revelación
Para muchos, las investigaciones científicas se han vuelto una maldición. Al permitir todo género de descubrimientos en las ciencias y en las artes, Dios ha derramado sobre el mundo raudales de luz; pero aun los espíritus más poderosos, si no son guiados en sus investigaciones por la Palabra de Dios, se extravían en sus esfuerzos por encontrar las relaciones existentes entre la ciencia y
la revelación. —Seguridad y Paz en el Conflicto de los Siglos, 576 (1888).
Cristo podría haber abierto las puertas de la ciencia
Un ministro dijo cierta vez que a él le habría gustado que Cristo hubiera sabido algo acerca de las ciencias. ¿De qué estaba hablando ese ministro? ¡De las ciencias! Cristo podría haber abierto una tras otra las puertas de la ciencia. Podría haber revelado a los hombres tesoros científicos que les habrían servido de festín hasta el día de hoy. Pero como sabía que ese conocimiento habría sido empleado con propósitos impíos, no abrió esas puertas. —Manuscrito 105, 1901; Medical Ministry, 116.
La educación del discipulado incluye oscuras horas de prueba
Esa noche, en aquel barco, los discípulos asistieron a una escuela, donde recibieron su educación para la gran obra que debían hacer después. Cada cual tendrá que enfrentar oscuras horas de prueba como parte de su educación para una obra superior, para un esfuerzo más devoto y consagrado. La tormenta no fue enviada a los discípulos para hacerlos naufragar, sino como una prueba individual […]. Pronto habrá terminado el tiempo destinado a nuestra educación. No tenemos tiempo que perder caminando a través de las nubes de la duda y de la incertidumbre. Debemos permanecer junto a Jesús. Que nadie […] eluda una lección dura, o pierda la bendición de una disciplina severa. —Nuestra Elevada Vocación, 58 (1892).
MENTE CARÁCTER Y PERSONALIDAD TOMO #2 SECCIÓN #14: LOS PENSAMIENTOS Y SU INFLUENCIA Capítulo 77: LA FALSA CIENCIA Por: Elena G De White Colaboradores: Liseth Orduz & América Lara