«Satanás procura siempre pervertir lo que Dios ha dicho, a fin de cegar la mente y obscurecer el entendimiento, y así inducir a los hombres a pecar. Por esta razón es Dios tan explícito y presenta sus exigencias con tanta claridad que nadie necesita equivocarse. Dios procura constantemente atraer a los hombres a sí mismo y ponerlos bajo su protección, para que Satanás no ejerza sobre ellos su poder cruel y engañoso». (Patriarcas y profetas, p. 537).
APLÍCALO A TU VIDA
Martes
Lee la sección Más Luz de esta semana para arrojar una luz sobre Satanás y sus esquemas. Elena G. de White es cuidadosa al señalar que Dios es claro acerca de sus mandatos, porque Satanás crece cuando no sabemos claramente lo que espera Dios de nosotros y/o dejamos de obedecer a Dios. Cuando Dios nos da una orden, no lo hace con el propósito de castigarnos. Dios verdaderamente procura salvarnos la vida.
Dios habló a través de Moisés y Josué para advertir a su pueblo acerca de las maldiciones que les vendrían por causa del pecado y las bendiciones que recibirían como resultado de la obediencia. Lee Deuteronomio 28. Escribe cuatro bendiciones que Dios les prometió y cuatro maldiciones sobre las que Dios advirtió a su pueblo.
Bendiciones por obedecer
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Maldiciones por desobedecer
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