Y esta es la voluntad del que me ha enviado: que todo aquel que ve al Hijo y cree en él tenga vida eterna; y yo lo resucitaré en el día final (Juan 6:40).
Los seres humanos siempre hemos tenido interés en el futuro, incluso nos hemos atrevido a predecirlo. En mayo del año 2015 una revista estadounidense compartió con los lectores algunas de las predicciones más equivocadas de la historia.* En un artículo publicado en la misma revista se predijo que para el año 2000 ya no habría guerras y los pobres vivirían en grandes edificios. Otro autor se aventuró a pronosticar que ese mismo año no existirían los ratones. En 2006, a la pregunta: ‘¿Cuándo sacará Apple un teléfono?”, David Pogue respondió que «probablemente nunca”. En 1954, el científico Lewis L. Strauss afirmó que los avances científicos pondrían fin a las hambrunas.
Ahora bien, la peor predicción que alguna vez ha sido escuchada por los seres humanos salió de la boca de Satanás, cuando le dijo a Eva: «No morirán… Serán como Dios” (Génesis 3:4, 5, DHH). Lamentablemente, nuestros primeros padres le creyeron a Satanás y salieron en busca de la supuesta promesa de inmortalidad. ¿Se cumplió lo dicho por la serpiente? Por supuesto que no. Todos hemos visto el fracaso de la predicción diabólica y nos ha tocado lidiar con la muerte de algún ser querido. Cada nuevo amanecer nos pone frente a frente con la falsedad de las palabras del enemigo, y el hedor a muerte se respira en cada rincón de nuestro planeta.
¿De verdad queremos experimentar la inmortalidad? Entonces hemos de acercarnos y cerrar filas con el que “quitó la muerte y sacó a la luz la vida y la inmortalidad“(2 Timoteo 1:10). ¿Y quién es? Nuestro Señor Jesucristo. Él sí nos ofrece la posibilidad de vivir para siempre, de romper el poder que la muerte tiene sobre nosotros. Esta es su promesa:
«Y esta es la voluntad del que me ha enviado: que todo aquel que ve al Hijo y cree en él tenga vida eterna; y yo lo resucitaré en el día final” (Juan 6:40). Por haber creído en la promesa de Satanás, todos estamos expuestos a la muerte; pero si creemos en la promesa de Cristo, todos tendremos vida eterna, y los que hayan muerto serán resucitados. Te invito a creerle a Dios; él nunca falla en lo que ha prometido.
«What Was the Worst Prediction of all Time», The Atlantic (mayo de 2015), p.136.
Tomado de: Lecturas Devocionales para Adultos 2023 «YO ESTOY CONTIGO» Promesas Bíblicas para vivir confiado Por: VLADIMIR POLANCO Colaboradores: Silvia García & Alexandra Pérez