«¡Alabemos a nuestro Dios! ¡Démosle gracias, porque él es bueno!
¡Dios nunca deja de amarnos!» Salmo 107: 1, TLA
Llevamos varios días hablando de la gratitud. ¿Recuerdas qué hemos dicho que es la gratitud? La gratitud es cuando muestras a las personas lo contento que estás por lo bueno que hicieron por ti. Puedes decirles gracias, les puedes dar un abrazo o hacerles un regalo. Vamos a poner un ejemplo. Imagina que a mamá se le cae algo de la mano. Papá lo recoge y se lo devuelve. ¿Qué es lo primero que va a hacer mamá? Le va a dar las gracias.
En una ocasión, Jesús estaba en el templo. El templo era como le llamaban a la iglesia en los tiempos de Jesús. Jesús vio que las personas ricas echaban mucho dinero en la caja de las ofrendas.
Pero entró en el templo una viuda que era pobre: solo tenía dos monedas. Sin embargo, como estaba agradecida a Dios por su amor y cuidado, la viuda pobre echó con alegría las dos monedas que tenía, a pesar de que a ella le hacía falta el dinero. Ella confiaba en que Dios seguiría proveyendo para sus necesidades.
Dios cuida de ti, igual que cuidaba de la viuda pobre. ¿Qué puedes hacer para agradecerle su cuidado? Puedes darle las gracias al orar y llevar una ofrenda de gratitud a la iglesia.
Tomado de: Lecturas Devocionales para Preescolares 2023 «QUIERO SER COMO JESÚS» Por: DILEISI ALIMARIS PACHECO Colaboradores: Magda & Estrellita Hernández