«Ahora bien, hay diversos dones, pero un mismo Espíritu. Hay diversas maneras de servir, pero un mismo Señor. Hay diversas funciones, pero es un mismo Dios el que hace todas las cosas en todos». (1 Corintios 12:4-6)
PLAN DE LECTURA PARA ESTA SEMANA
El conflicto de los siglos, capítulos 19, 20, 21. *Siguiendo este plan podrás leer al menos un libro cada año de la serie El Conflicto de los Siglos.
¿QUÉ OPINAS?
Lee las siguientes definiciones de lo que significa ser un «siervo» y un «mayordomo». Decide entonces si estás de acuerdo o en desacuerdo con esas afirmaciones, y explica tu respuesta.
Ser un siervo tiene que ver con la actitud de nuestro corazón hacia Dios y hacia el ministerio de servicio. Según 1 Corintios 13:1-3, si usamos nuestros dones espirituales sin amor, de nada nos sirve. La devoción auténtica de servir, honrar y adorar a Cristo es esencial para el ministerio efectivo.
La mayordomía tiene que ver con nuestra responsabilidad ante Dios. Una vez que identificamos cuáles son nuestros dones espirituales y crecemos en su comprensión, tenemos que ser res pon sables en nuestra manera de utilizarlos. En 1 Corintios 12:1 se nos recuerda que es nuestro deber identificar cuáles son nuestros dones espirituales porque tendremos que dar cuenta del uso que hacemos de ellos (1 Pedro 4:10; Mateo 25:14-30).
APLÍCALA A TU VIDA
Completa la actividad de la sección ¿Qué opinas? Las palabras servicio y mayordomía a menudo se prestan a malentendidos. Para algunos, ser un siervo significa permitir que otros nos digan cómo tenemos que vivir. Para otros, la mayordomía se refiere tan solo al dinero.
¿En qué sentido las definiciones de servicio y mayordomía son similares a lo que crees respecto a estas dos cualidades? ¿En qué sentido difieren? ¿Cómo podrías volver a redactar estas definiciones?
Lección de Escuela Sabática para Jóvenes. 3er. Trimestre 2022 “COMPROMISO BAJO FUEGO” Lección 10: «ESTE ES TU LUGAR» Colaboradores: Karla González & Gisela Barbosa