“La oración es una necesidad porque es la vida del alma. La oración en familia, la oración en público, tienen su lugar, pero es la comunión secreta con Dios la que sostiene la vida del alma”.—La Educación, 252.
″La oración es necesaria para la salud espiritual″
Varias veces por día debieran consagrarse momentos preciosos, áureos, a la oración y al estudio de las Escrituras, aunque solo fuese para memorizar un texto, a fin de que la vida espiritual pueda existir en el alma. Los intereses variados de la causa se constituyen en alimento para la reflexión y son una inspiración para nuestras oraciones. La comunión con Dios es sumamente esencial para la salud espiritual, y es en esa comunión solamente que podremos obtener la sabiduría y el juicio recto tan necesarios en la realización de cada deber.—Testimonies for the Church 4:459.