«El Señor es bondadoso, refugio en día de angustia; acoge a quienes en él se refugian». Nahúm 1: 7, LPH
DIOS ES LA FUENTE de toda sabiduría. Él es infinitamente sabio, justo y bueno. Aparte de Cristo, los hombres más sabios no pueden comprenderle […]. Si los hombres pudiesen ver por un momento más allá del alcance de la visión finita, si pudiesen discernir una vislumbre de lo eterno, toda boca dejaría de jactarse. Los hombres que viven en este pequeño átomo del universo son finitos; Dios tiene mundos innumerables que obedecen a sus leyes, y son conducidos para gloria suya.—Consejos para los maestros, cap. 9, p. 54.
Nada puede ocurrir en ningún lugar del universo sin el conocimiento del Omnipresente. Ni el más simple acontecimiento de la vida humana es desconocido a nuestro hacedor. Mientras Satanás está constantemente tramando el mal, el Señor nuestro Dios domina en todo, de modo que ningún daño podrá ocurrirles a los hijos obedientes que confían en él. El mismo poder que sujeta las turbulentas olas del océano, puede controlar todo el poder de la rebelión y la delincuencia. Tanto a lo uno como a lo otro, Dios dice. «Hasta aquí llegarás y no pasarás» (Job 38: 11).
¡Cuántas lecciones de humildad y fe podríamos aprender si contempláramos el trato de Dios con sus criaturas! El Señor puede hacer muy poco por los hijos de los hombres, porque ellos están llenos de orgullo y vanagloria. Se exaltan a sí mismos y magnifican su propia fuerza, conocimiento y sabiduría. Dios necesita frustrar sus esperanzas y sus planes, para que puedan aprender a confiar solo en él.— Comentario bíblico adventista, t. 3, p. 1159.
Devocional Vespertino Para 2021. «La Fe por la cual vivo» «LOS TRES DIGNATARIOS DEL CIELO» Por: Elena G. de White Colaboradores: Martha González & Joaquín Maldonado