Confía en Jehová, y haz el bien; y habitaras en la tierra y te apacentaras de la verdad. SALMO 37:3
¿Confías en Dios en todo momento y circunstancia? ¿Confías en él aunque tarde en responder a tus peticiones? ¿Confía en él aunque responda de una manera contraria a lo que esperas?.
Conocí a una joven madre de veinticuatro años de edad. Tenía una hermosa bebé. Servía fielmente al Señor junto con su esposo. Era una pareja muy feliz. Un día esa felicidad se vio interrumpida. Después de un examen médico, le diagnosticaron a esta joven esposa un cáncer terminal. Oraron durante varios meses para que el Señor la restableciera, pero, con el correr del tiempo, su cuerpo se iba debilitando más cada vez. Los que la visitaban sabían que la hora de su muerte se aproximaba. Un día vino a visitarla uno de sus amigos, quien le dijo: «Tengo una buena noticia para ti. Puedes ser curada de tu terrible enfermedad. Te aconsejo que visites el centro espiritista. Te aseguro al cien por cien que tu cáncer desaparecerá. Muchas personas que han visitado dicho centro han sanado de sus enfermedades». La respuesta de esta hija de Dios fue: «No iré. Prefiero perder unos cuantos años más de vida en esta tierra que privarme de vivir eternamente con Jesús. Estoy dispuesta a confiar plenamente en él hasta que dé mi último suspiro».
¿Cuáles son las razones que se nos presentan en la Palabra de Dios para confiar firmemente en él en toda circunstancia?
• Él es absolutamente fiel. El profeta dice: «Grande es tu fidelidad» (Lam. 3:23). ¿Cuándo fue la última vez que Dios se apartó y te dejó solo? Nunca lo ha hecho y nunca lo hará. Independientemente de lo que estés afrontando, Dios conoce cada detalle de tu vida y está contigo para mostrarte cómo resolver cada uno de tus problemas.
• Él es poderoso. Jesús dijo: «Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra» (Mat. 28: 18). Henry Thiessen escribió: «Dios puede hacer todo lo que sea su voluntad, pero él no necesariamente hará todas las cosas». El Dios omnipotente es una fuente de consuelo y esperanza para el cristiano.
• Él te ama incondicionalmente. «Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado» (Juan 15:9). Dios nunca ha dejado de amarte, ni cuando te portas mal. Es precisamente la seguridad de su amor lo que te aparta del pecado.
Gózate hoy, cualquiera sean las circunstancias que enfrentes. Confía plenamente, porque tu Dios es fiel, poderoso, y te ama con amor eterno.
Tomado de: Lecturas Devocionales Familiares 2020
«Siempre Gozosos: Experimentando el amor de Dios»
Por: Juan O Perla
Colaboradores: José Luc & Silvia García