En hebreos 4: 15 leemos: «Nuestro Sumo sacerdote puede compadecerse de nuestra debilidad, porque él también estuvo sometido a las mismas pruebas que nosotros; solo que él jamás pecó».
Algunos afirman que Jesús fue tentado literalmente en todas las formas posibles en que cada ser humano ha sido tentado. En alguna parte de la vida de Cristo que no fue registrada en las narrativas de los Evangelios, Jesús debió ser tentado a usar drogas para mitigar el dolor, con la idea de aniquilar a alguien utilizando radiación nuclear, con la pornografía, etcétera.
Por otro lado, hay quienes dicen que eso es absurdo, que Cristo solo fue tentado de las tres maneras que registra Mateo 4, cuando fue llevado por el Espíritu al desierto para ser tentado por el diablo. Afirman que Cristo fue tentado de una manera muy particular y personal, y que aunque obtuvo la victoria, no tiene relación contigo y conmigo hoy, pues nuestras tentaciones son muy diferentes.
La primera postura convierte a Jesús en un ser humano humillado, mientras que la segunda lo coloca en un ámbito etéreo, relegándolo a simple personaje histórico sin ninguna calidad humana.
Filipenses 2 presenta la solución a esta disyuntiva. Originalmente la declaración de Pablo tenía el objetivo de resolver una disputa interna de la iglesia de Filipos. El apóstol escribe respecto a la abnegación y a la humildad de Cristo cuando dice: «Tengan unos con otros la manera de pensar propia de quien está unido a Cristo Jesús» (Fil. 2: 5). Jesús era Dios y por tanto completamente divino, pero se humilló no solo para convertirse en hombre, sino para sufrir una muerte ignominiosa como ser humano. Pablo enfatiza que Cristo murió la muerte de la cruz (v. 8), una forma de ejecución aplicada a las clases sociales más bajas.
Pongamos esto en un lenguaje más claro. Tomando como referencia la analogía presentada en la sección inTro, Cristo fue «en todos los puntos tentado como nosotros», pero de una manera diferente porque era un ente divino, digamos que era otro tipo de automóvil. Nosotros, cuando somos tentados con la intemperancia, tenemos que decidir si vamos a comer lo que tenemos en frente o no; sin embargo, cuando Cristo fue tentado, tuvo que decidir si iba a usar su poder creador para reorganizar la materia de la que estaban hechas las piedras, para así convertirlas en un pan comestible. Quizás se sintió tentado a eliminar las hormonas productoras del hambre en su organismo; tal vez a eliminar el concepto de comida; ¡La lo mejor a reorientar el universo con el fin de que las nociones de consumo y necesidad fueran eliminadas! ¡Quién sabe cuál es el alcance de la tentación cuando es experimentada por alguien que forma parte de la divinidad!
Mientras luchamos respecto a si debemos emplear nuestras capacidades humanas para satisfacer deseos egoístas, recordemos que también Cristo estuvo tentado a usar su divinidad para beneficio propio, aunque fuera en una manera del todo diferente. Y porque Cristo venció, «por eso Dios le dio el más alto honor y el más excelente de todos los nombres» (Fil. 2: 9). De acuerdo con esto, los seguidores de Cristo deben seguir su ejemplo, humillarse y negarse a sí mismos en busca de un bien mayor. En el caso de los filipenses, Pablo deseaba que dos damas se llevaran bien (ver Fil. 4: 2), y «que se pongan de acuerdo». Respecto a los discípulos de Cristo del siglo XXI, ¿cómo se manifestará el carácter de Cristo en sus vidas?
Regresa al texto que has copiado o parafraseado. Analízalo directamente y reflexiona sobre su contenido con el máximo detenimiento.
Encierra en un círculo las palabras, frases e ideas que se repiten,
Subraya las palabras y frases que consideras más relevantes y que te resultan más significativas.
Utiliza flechas para conectar algunas palabras y frases que se relacionan con otros conceptos similares.
«¿A qué parece apuntar lo que marcaste?
Del pasaje clave, selecciona un versículo para memorizarlo.
Escríbelo varias veces con el fin de que te sea más fácil recordarlo.
Si Cristo pudo darles un corazón abnegado a los filipenses, ¿Qué no podrá hacer por ti?
¿Qué elementos relacionados con la abnegación propia y la humildad necesitas en tu vida?
Lección de Escuela Sabática Para Jóvenes Universitarios 2020. 3er trimestre 2020 “Las Bases Del Discipulado” Lección 12: «LA NEGACIÓN AL YO« Colaboradores: Hidai Juarez S & Misael Morillo