En su providencia, el Señor ha abierto el camino para que sus obreros den un paso adelante en New England, un campo donde debiera hacerse mucha obra especial. Los hermanos de ese lugar han podido hacer los arreglos para cambiar la ubicación del sanatorio desde South Lancaster a Melrose, un lugar mucho más cerca de Boston, y sin embargo suficientemente alejado de la ocupada ciudad como para que los pacientes puedan tener las condiciones más favorables para la recuperación de la salud. El traslado del Sanatorio de New England a un lugar tan accesible para la ciudad de Boston, está en la providencia de Dios. Cuando el Señor pone su mano para preparar el camino ante nosotros, no permita Dios que alguien dé un paso atrás, cuestionando la sabiduría de avanzar o negándose a alentar y ayudar. El traslado del Sanatorio de New England de South Lancaster a Melrose me ha sido presentado como dirigido por el Señor.—Special Testimonies, Series B 13:3 (1902).