Las cosechas inmaduras son aquellas que se observan cuando las iglesias no preparan adecuadamente a los candidatos para el bautismo. Se bautizan sin conocer o aceptar completamente las enseñanzas fundamentales de la Biblia, o sin tomar la decisión de seguir a Cristo en aspectos prácticos de sus vidas.
Las cosechas inmaduras pueden deberse a que los obreros del evangelio sienten la presión de bautizar a un mayor número de personas, o a que descuidan la tarea de instruir fielmente a los nuevos conversos en conceptos prácticos. El primero surge para evitar la vergüenza de no producir nuevos miembros, mientras que el segundo tiene su origen en el temor.
Aunque el número de bautismos aumenta cuando se emplean dichos métodos, los nuevos conversos salen del bautisterio para dirigirse a la puerta trasera de la iglesia. Aquellos que no tienen conocimientos firmes, o que no están totalmente dispuestos a poner en práctica la verdad, a menudo abandonan los principios de la fe, así como al Originador de dichas verdades. Y si llegan a permanecer como miembros, a menudo se convierten en fuente de diversos problemas en el seno de la iglesia. Por Io tanto, nuestro proceso de discipulado antes y después del bautismo necesita ser mejorado.
Debemos asegurarnos de que todos los que desean ser bautizados y entrar en un caminar de discipulado con Cristo, tengan pleno conocimiento de aquello en lo que se están metiendo. Esto requiere una sólida relación con un mentor para discutir, orar y superar cualquier posible disonancia doctrinal que pudieran percibir en las Escrituras, así como cualquier otra disensión de carácter espiritual.
Después del gozo de la cosecha, no debemos relajar nuestros esfuerzos para hacer discípulos. Jesús nos llamó a hacer discípulos, no a ganar miembros para la iglesia. Esto requiere que conservemos la cosecha a través de un discipulado intencional y sistemático. Después del bautismo debemos dedicar ¡el mismo cuidado, la misma inversión y el mismo tiempo que dedicamos antes del bautismo!
Para que el proceso de hacer discípulos sea un ciclo continuo, debemos nutrir a los nuevos miembros de la iglesia y adiestrarlos para que participen en la labor de hacer más discípulos.
El consumidor debe convertirse en productor.
El receptor debe convertirse en donante.
El que ha sido «pescado por la red» del evangelio debe convertirse en «pescador» de hombres y mujeres para Cristo.
Regresa al texto que has copiado o parafraseado. Analízalo directamente y reflexiona sobre su contenido con el máximo detenimiento.
Encierra en un círculo las palabras, frases e ideas que se repiten,
Subraya las palabras y frases que consideras más relevantes y que te resultan más significativas.
Utiliza flechas para conectar algunas palabras y frases que se relacionan con otros conceptos similares.
¿A qué parece apuntar lo que marcaste y relacionaste?
Del pasaje clave, selecciona un versículo para memorizarlo.
Escríbelo varias veces con el fin de que te sea más fácil recordarlo.
¿Cómo podrían erradicarse la vergüenza y el temor del proceso del discipulado?
Lección de Escuela Sabática Para Jóvenes Universitarios 2020. 3er trimestre 2020 “Las Bases Del Discipulado” Lección 10: «EL PROCESO DEL DISCIPULADO: CONSERVAR LA COSECHA« Colaboradores: Hidai Juarez S & Misael Morillo