En la guerra que se librará en los últimos días estarán unidos, en oposición al pueblo de Dios, todos los poderes corruptos que han apostatado de su lealtad a la ley de Jehová. En esta guerra, el sábado del cuarto mandamiento será el gran punto en discusión, pues en el mandamiento del sábado el gran Legislador se identifica a sí mismo
como el Creador de los cielos y la tierra.—Mensajes Selectos 3:448 (1891). “En verdad vosotros guardaréis mis días de reposo [o sábados]— dice el Señor—; porque es señal entre mí y vosotros por vuestras generaciones, para que sepáis que yo soy Jehová que os santifico”. Éxodo 31:13. Algunos tratarán de poner obstáculos en el camino de la observancia del sábado, diciendo: “Vosotros no sabéis cuál es el día de reposo”; pero parecen entender cuándo llega el domingo y han manifestado gran celo en formular leyes que obliguen su observancia.—The Kress Collection, 148 (1900).