«Jehová, tú me has examinado y conocido. Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme. Has entendido desde lejos mis pensamientos. Has escudriñado mi andar y mi reposo, y todos mis caminos te son conocidos, pues aún no está la palabra en mi lengua y ya tú, Jehová, la sabes toda. Examíname, Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos. Ve si hay en mí camino de perversidad y guíame en el camino eterno». Salmo 139: 1-4, 23-24
NADA MÁS TRAICIONERO que la falacia del pecado. Es el dios de este mundo que engaña, ciega y conduce a la destrucción. Satanás no expone todas sus tentaciones a la vez. Las disfraza con una máscara de bien. Mezcla algo parcialmente positivo con maldades y extravagancias, y los que han sido engañados dan como excusa que tener parte en ellas reporta un gran bien. Esta no es más que la parte engañosa. Son las infernales artes satánicas enmascaradas. Las personas engañadas dan un paso y se preparan para el siguiente. Es mucho más placentero seguir nuestras inclinaciones que estar a la defensiva y resistir la primera insinuación del astuto enemigo, y así impedir sus intrusiones.
¡Cómo acecha Satanás para ver cuán fácilmente se muerde su anzuelo, y para ver a alguien andar precisamente en la senda que él ha preparado! Él no quiere que abandonen la apariencia de oración y prácticas religiosas, pues así puede hacerlos más útiles en su servicio. Une su sofistería y sus trampas engañosas con la experiencia y la profesión de fe de ellos, y así hace progresar exitosamente su causa.
Existe la necesidad de examinarse íntimamente y de preguntarse a la luz de la Palabra de Dios: «¿Soy íntegro o corrupto de corazón? ¿Estoy renovado en Cristo o soy todavía carnal de corazón, cubierto solo exteriormente con un vestido nuevo?». Acérquense al tribunal de Dios y observen, como a la luz de Dios, si hay algún pecado oculto, alguna iniquidad, algún ídolo que no hayan sacrificado. […] Enfrenten sinceramente su propia realidad, analizándola cuidadosamente.— Mensajes para los jóvenes, secc. 2, p. 58.
Devocional Vespertino Para 2020. «Conocer al Dios Verdadero» «FAMILIARIZÁNDONOS CON LA MISERICORDIA DE DIOS» Por: Elena G. de White Colaboradores: Pilita Mariscal & Martha Gonzalez