«Entonces el rey Nabucodonosor se postró sobre su rostro y se humilló ante Daniel, y mandó que le ofreciesen presentes e incienso. El rey habló a Daniel, y dijo: “Ciertamente el Dios vuestro es Dios de dioses, y Señor de los reyes, y el que revela los misterios, pues pudiste revelar este misterio”». (Daniel 2: 46, 47)
Plan de lectura para esta semana*
Profetas y reyes, capítulo 40 *Siguiendo este plan podrás leer al menos un libro cada año de la serie El Conflicto de los Siglos.
¿QUÉ OPINAS?
Por favor, contesta las siguientes preguntas:
¿Por qué crees que Nabucodonosor probó a sus magos y adivinos en esta historia?
¿No se te hace que descuartizarlos y destruir sus hogares fue un castigo bastante extremo?
¿Crees que el rey haya tenido problemas en recordar su sueño y por eso les pidió a los sabios no solo que interpretaran el sueño sino que se lo recordaran también?
¿No pudieron haberse inventado una historia para el rey? ¿Por qué sí, o por qué no?
APLÍCALA A TU VIDA
A Daniel nuevamente lo vemos confiando completamente en la sabiduría que Dios le ha dado. Es sorprendente cuando se piensa en todo lo que Daniel pudo hacer en su vida con el solo hecho de depender de Dios. Me imagino que la pregunta es la siguiente: «¿Vivimos nuestras vidas con esa misma dependencia?» Sé que me siento bastante capaz, algo que me imagino que tú también sientes. En ocasiones siento que soy tan capaz que en realidad no necesito que Dios dirija mi camino. Creo que como humanos todos luchamos con esas emociones. ¿Por qué será que se nos dificulta tanto depender de Dios? Recuerda que Daniel no solo dependió de Dios para la interpretación del sueño sino para saber cuál había sido el sueño.
Daniel respondió delante del rey, diciendo: “El misterio que el rey demanda, ni sabios, ni astrólogos, ni magos ni adivinos lo pueden revelar al rey. Pero hay un Dios en los cielos, el cual revela los misterios, y él ha hecho saber al rey Nabucodonosor lo que ha de acontecer en los postreros días”» (Daniel 2: 27, 28). ¿Alguna vez has aceptado el crédito por algo que no fue completamente obra tuya? ¿Alguna vez has formado parte de algo grande que no fue tanto trabajo tuyo sino el de un equipo, pero aun así pensaste que deberías recibir la gloria? Daniel fue preciso sobre quién merecía el crédito por revelar e interpretar el sueño del rey Nabucodonosor. El suyo es un ejemplo maravilloso sobre cómo darle el crédito a Dios por las cosas que él hace y nos revela. Comenzó por proclamar el poder divino de Dios y su responsabilidad por las cosas grandiosas que suceden.
Lección de Escuela Sabática para Jóvenes.
3rd. trimestre 2020 “REGRESO AL FUTURO”
Lección 6: «Dios le mostró el sueño»
Colaboradores: Gisela B. Barbosa & Antonio Orellana