PARA ESTUDIAR Y MEDITAR:
Lee Elena de White, Los hechos de los apóstoles, “El propósito de Dios para su iglesia”, pp. 9-14; y El Deseado de todas las gentes, pp. 761-768. La iglesia del Nuevo Testamento enfrentaba el peligro de no entender el propósito de su existencia. Elena de White describe este peligro: “La persecución que sobrevino a la iglesia de Jerusalén dio gran impulso a la obra del evangelio. El éxito había acompañado la ministración de la Palabra en ese lugar, y había peligro de que los discípulos permanecieran demasiado tiempo allí, desatendiendo la comisión del Salvador de ir a todo el mundo. Olvidando que la fuerza para resistir al mal se obtiene mejor mediante el servicio agresivo, comenzaron a pensar que no tenían ninguna obra más importante que la de proteger a la iglesia de Jerusalén de los ataques del enemigo. En vez de enseñar a los nuevos conversos a llevar el evangelio a quienes no lo habían oído, corrían el peligro de adoptar una actitud que indujera a todos a sentirse satisfechos con lo que habían realizado” (HAp 87, 88).
PREGUNTAS PARA DIALOGAR:
1. Lee cuidadosamente la cita de Elena de White que aparece arriba, especialmente la última línea. ¿Por qué incluso hoy debemos tener cuidado con el mismo peligro potencial? Ante los desafíos misioneros
que tenemos por delante, ¿por qué esa actitud sería tan terrible, incluso trágicamente, equivocada?
2. ¿Por qué crees que cada uno de los evangelios termina con un mandato similar? Lee Mateo 28:18 al 20, Marcos 16:15 y 16, Lucas 24:46 al 49 y Juan 20:21. ¿Qué significó esto para los creyentes del primer
siglo y qué debería significar para nosotros hoy?
3. ¿Pueden el testimonio y el servicio convertirse en un sustituto de la espiritualidad genuina? Si es así, ¿de qué manera, y cómo podemos cuidarnos de esa trampa?
4. En clase, habla acerca de la respuesta a la pregunta que está al final de la lección del martes, sobre cómo ser testigo y ministrar impacta en tu propio crecimiento espiritual. ¿Cuáles son algunas cosas que
has aprendido que pueden ayudar a otros? ¿Qué errores has cometido que podrías ayudar a otros a evitar?
5. Reflexiona sobre el hecho sorprendente de que Dios nos ama a cada uno de nosotros individualmente. ¿Cómo entiendes lo que esto significa? ¿Cómo debería esto, quizás la verdad más importante en
todo el universo, impactar tu forma de vida?