Aunque la mayoría, incluyendo a muchos cristianos, no sabe demasiado
sobre el libro de Apocalipsis, una imagen o palabra de él ha llegado a la
cultura popular: Armagedón (ver Apoc. 16:16). Incluso en la cultura secular
la palabra ha llegado a representar una lucha final en la que el destino de
la tierra pende de un hilo. Hollywood produjo una película llamada Armagedón,
sobre un asteroide gigante preparado para destruir el planeta.
En cierta medida, la idea del fin del mundo también está en la mente de la
gente secular.
Muchos cristianos que están familiarizados con el libro de Apocalipsis
y creen en él consideran que la batalla del Armagedón será un conflicto militar
literal en Medio Oriente cerca del fin del mundo. Una versión sostiene
que un ejército de doscientos millones de hombres procedentes de Asia
arrasará el norte de Israel. Otros se centran exclusivamente en los diversos
conflictos militares y políticos en esa parte del mundo, que, a su entender,
prepararán el escenario para la última batalla militar del Armagedón en
la zona de Meguido.
Sin embargo, la Biblia da una imagen totalmente diferente. La Biblia
presenta el Armagedón como el punto culminante, no entre las naciones
en guerra, sino entre los dos bandos del Conflicto Cósmico. Es una lucha
religiosa, no económica ni política, por más que haya muchos factores económicos
y políticos en juego. Lee Apocalipsis 16:12 al 16. Únicamente con estos versículos, ¿qué podemos aprender del Armagedón? _____________________________________________________________
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En primer lugar, observa cuán simbólico es el lenguaje. Espíritus como
de ranas que salen de la boca del dragón, de la boca del falso profeta y de
la boca de la bestia (referencias a los poderes de Apoc. 13; el “falso profeta”
aquí debe referirse a la bestia que sale de la tierra de Apoc. 13:11). El Gran
Conflicto también se hace evidente cuando los “espíritus de demonios”
(Apoc. 16:14) salen a la batalla “de aquel gran día del Dios Todopoderoso”
(Apoc. 16:14). Sea cual fuere la forma en que se desarrolle el Armagedón, será
un conflicto mundial entre las fuerzas de Cristo y las de Satanás. No será
una batalla local en la zona de Meguido, así como tampoco la Babilonia de
Apocalipsis describe acontecimientos en una parte de Irak en la actualidad.
Lee Apocalipsis 16:15. Es fascinante que, en medio de estos acontecimientos, Jesús nos anime con el mensaje del evangelio, con la promesa de su venida y con la necesidad de cubrirnos con su justicia. ¿Cómo nos ayuda esto a entender la naturaleza espiritual de la batalla en la que estamos?