En mi Biblia: «Con tu apoyo […] Dios mío, podré saltar murallas» (Salmo 18: 29, NVI).
Tiempo de sentir
A TODOS NOS GUSTA ganar. Los campeones se sienten felices. Algunos niños y niñas se ponen muy tristes cuando no ganan. Es bueno que ganemos, pero también es bueno que los demás ganen.
Los niños que obedecen a sus padres al momento son campeones. Los niños que no roban son campeones. Los campeones no hacen daño a nadie. Los campeones son bondadosos.
Tú también puedes ser un campeón. Jesús ha prometido ayudarte para que lo seas. Cualquier niño o niña puede ser un campeón. Lo único que necesitas es hacer lo que Jesús te pide. ¡Es maravilloso ser campeón!
Actividad: Haz una lista de algunos campeones deportivos que conozcas. Proponte ser un campeón en ayudar a los demás.
Oración: Gracias, Jesús, porque yo puedo ser un campeón.