«»Les aseguro -respondió Jesús- que todo el que por mi causa y el evangelio haya dejado casa, hermanos, hermanas, madre, padre, hijos o terrenos, recibirá cien veces más en este tiempo […] y la vida eterna»» (Marcos 10: 29-30, NVI).
A PRINCIPIOS DEL SIGLO XX, el famoso multimillonario Andrew Carnegie se puso muy triste al perder a su mascota a orillas del lago Míchigan. Por eso decidió poner un anuncio en el periódico que decía: «Se busca a un Fox Terrier blanco que responde al nombre de Billy. Recompensa de mil dólares a quien lo encuentre».
Al día siguiente, Andrew Carnegie comprobó con asombro que el anuncio no se había publicado, así que fue a las oficinas del periódico para preguntar por qué no habían publicado su anuncio.
Al llegar descubrió que no había nadie más que la señora de la limpieza. «¿Dónde estarán todos?», pensó, y decidió averiguarlo.
-¿Es que no hay nadie? -le preguntó a la señora de la limpieza.
-No -respondió ella-. Se han ido todos a buscar a un perro blanco llamado Billy. ¿Qué te parece esta historia? ¿Cómo la has interpretado? Lo cierto es que tiene más de una interpretación. La puedes interpretar de varias formas:
• Que los empleados del periódico fueron irresponsables al no cumplir sus deberes.
• Que les importaba más el dinero que su trabajo.
• Que eran trabajadores muy solidarios con el necesitado.
• Que todos eran amantes de los perros y decidieron ayudar al dueño a encontrarlo.
• Que conocían muy bien al dueño del perro, pues era vecino de ellos.
Seguramente tú tendrás tu propia interpretación de esta historia, pero yo diría que los trabajadores fueron irresponsables porque les importó más el dinero que su trabajo. La recompensa económica es la que, en general, más le interesa a la gente. ¿Sabías que Jesús ha ofrecido una recompensa a quienes lo busquen? La recompensa es nada más y nada menos que la vida eterna: casa propia, no te dolerán nunca más las muelas, se acabarán las vacunas, harás viajes interplanetarios…
Anímate a buscar a Jesús cada día, para que puedas pronto recibir tu gran recompensa.