Los discípulos por definición eran «aprendices» que debían asumir el rol de sus maestros. Jesús ya había enviado a sus discípulos y ellos habían sanado a los enfermos y habían echado demonios. ¿Acaso no esto no era suficiente como para creer en él?Los pueblos antiguos pensaban que las montañas tenían raíces profundas en la tierra(Gundry 1982:353), así que «mover montañas», para un maestro judío, era un ejemplo típico que evocaba la idea de hace algo totalmente imposible.
Con esta ilustración Jesús indica que aunque tuviéramos que mover montañas en vez de echar demonios, solo rasguñaríamos la superficie de una vida de fe. ¿Qué podríamos hacercon una fe más grande que una semilla de mostaza?
Como niños que dan sus primeros pasos, la mayoría de nosotros estamos iniciando nuestra aventura de fe (Tomado de BibleGateway.com.).
Mientras más se acerca el momento de obtener la licencia de conducir, más difícil es sentarse en el asiento de pasajero. En este momento de tu vida, Jesús quiere que tengas fe para mover montañas. ¿Te entusiasma la idea de poder mover montañas? Describe cómo es que este entusiasmo, o falta del mismo, revela tu condición espiritual?