NIÑOS INVISIBLES
El que reciba en mi nombre a un niño como este, me recibe a mí; y el que a mí me recibe, no me recibe a mí sino al que me envió (Marcos 9:37)
En la calle detrás de ella, se extendía una larga fila de estudiantes. Veía rastas y pecas; mochilas y botellas de agua. Veía ojos muy abiertos y sintió la emoción de la acción que ondulaba a través de la multitud.
Una noche. Una caminata de varios kilómetros. Ella y muchos otros habían caminado desde todas partes para dormir en ese lugar: el césped al otro lado del edificio del capitolio de la ciudad.
A un océano de distancia, los niños en Uganda vivían con el temor de que un ejército rebelde pudiera secuestrarlos mientras dormían y los obligaran a ser soldados. Cada día caminaban kilómetros en las ciudades y dormían en los porches, en los pisos de cemento, hacinados en espacios reducidos, donde pudieran estar a salvo. Ella quería que la gente se enterara, que los tomaran en cuenta, y que hicieran algo para mantener seguros a los niños de Uganda.
-¡Mira a toda la gente! –oyó que alguien silbaba.
Sí, pensó, solo una fracción de los miles de niños ugandeses que deben hacer esto todos los días.
Su grupo llegó los pies hasta un stand donde los voluntarios les entregaron camisetas en las que se leía “niños invisibles”. Luego posó para foto grupal, delante del césped, donde más personas estaban extiendo unas lonas y bolsas de dormir.
-Aquí hay un poco de papel para sus cartas al presidente y los senadores –les dijo una chica con un pañuelo -. Gracias por venir.
Yo soy una persona, pensó. Pero sabía una cosa. Si cada persona que había visto escribiendo cartas para los niños de Uganda hubiera pensado lo mismo, el césped estaría vacío.
SPLASH
Aunque la mayoría de las organizaciones no gubernamentales dicen que han muerto entre 200 000 y 400 000 personas en Danfur; el Gobierno sudanés afirma que han muerto solo alrededor de 9 000.
¿Y AHORA?
Obtén más información sobre los niños invisibles.
Visita www.invisiblechildren.com (sitio en inglés).
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Tomado de: Matinal para Adolescentes 2016
“Intensamente, Ejercita tu Cerebro”
Compilado por Penny Estes Wheeler
