«No crean ustedes que yo he venido a suprimir la ley o los profetas; no he venida a ponerles fin, sino a darles su pleno valor». Mateo 5: 17
Mira este dibujo, son dos tablas de piedra y tienen escritas unas palabras que están enumeradas. Vamos a contarlas. ¡Muy bien! Hay diez, como los deditos de tus manos, que también son diez.
Lo que está aquí escrito son diez leyes o mandatos que Jesús nos dio porque nos ama. Al obedecerlos mostramos nuestro amor hacia él y hacia los demás.
Cuando Jesús estuvo en la tierra, algunas personas pensaban que él no amaba la ley de Dios.
Pero Jesús les dijo que él no vino a la tierra a destruir los mandatos que el Señor les había dado. Jesús vino a cumplir con la ley de Dios.
Jesús obedeció todo lo que está escrito en la ley y espera que tú también puedas obedecerla y enseñarla a otros.
Al hacerlo serás considerado grande en el cielo y estarás mostrando tu amor hacía Dios y hacia las personas que te rodean.
Oración: Jesús, ayúdame a mostrarte mi amor, guardando tu ley y siendo obediente.