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Experimenta: Dios ya nos dio un enorme regalo de Navidad porque lo necesitábamos, y tú, ¿qué regalarás esta Navidad a alguien que tenga muchas necesidades? Aprovecha la oportunidad de esta celebración para alegrarte y alegrar el corazón de alguien.
Cuando era pequeña, una hermana de la iglesia a la que íbamos, en cada programa de Navidad recitaba el mismo poema, pero a nadie le molestaba. El poema se llama «La muñeca» y es una historia de una pequeña niña muy pobre que en una noche de Navidad, se cubría la cabeza con su falda para aplacar el frío y caminaba por las calles pidiendo una moneda para comer algo. Al pasar frente al aparador de una tienda, se detuvo a mirar una linda muñeca. El encargado intentaba echarla al ver su aspecto, pero ella insistía en ver la muñeca y hasta preguntó el precio. El hombre, muy enojado, respondió que un duro y la empujó lejos de la tienda.
La niña continuó su camino en la noche fría y pidió una limosna a un hombre que encontró. El hombre resultó ser bueno y le dio una 362 moneda. La niña vio que era justamente un duro, el precio de la muñeca. Emocionada, brincó de alegría frente al hombre bueno y le dio las gracias. ¿Qué imaginas que hizo con la moneda? ¿Comprarse algo para cenar o ropa abrigadora? No, fue a comprarse la muñeca. A la mañana siguiente, en el periódico del pueblo, apareció la noticia que una niña había muerto de frío afuera de una puerta, pero abrazaba una muñeca.
Ese relato siempre me ponía triste, pero cada vez que la escuchaba me hacía recordar que siempre hay alguien que tiene más necesidades que yo. Me preguntaba qué hubiera pasado si ese buen hombre le hubiera dado un poco más de dinero.
¿Cómo celebran la Navidad en tu familia? Algunas familias adornan sus casas, cocinan una gran cena y reparten lindos regalos. Eso está bien. Pero lo más importante es celebrar que Dios por amor a nosotros nos dio el mejor de todos los obsequios: Jesús, que dejó el cielo y vino a nacer en este planeta para salvamos de nuestros pecados en la cruz.
«Dará a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús, porque salvará a su pueblo de sus pecados» (Mateo 1:21)
Tomado de: Lecturas devocionales para Menores 2015
“Ciencia Divertida”
Por: Yaqueline Tello Ayala