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Piensa en los pasos que condujeron a la caída de Saúl. Lee 1 Samuel 15: 9-11 y fíjate en la fortaleza espiritual de Saúl al inicio del relato.
Nota cómo al comienzo de la carrera de Saúl «Dios le cambió el corazón» (1 Samuel 10: 9) y profetizó junto con los profetas en el collado.
Fíjate en la historia de Nahas el amonita y piensa en la decisión intrépida de Saúl de pelear en favor de Dios.
Pero después, como puedes ver en los Puntos de Impacto, algo en lo profundo del carácter de Saúl comenzó a desenmarañarse.
PUNTOS DE IMPACTO
«Pasó delante de Moisés, diciendo en voz alta: “¡El Señor! ¡El Señor! ¡Dios tierno y compasivo, paciente y grande en amor y verdad!”. Por mil generaciones se mantiene fiel en su amor y perdona la maldad, la rebeldía y el pecado; pero no deja sin castigo al culpable, sino que castiga la maldad de los padres en los hijos y en los nietos, en los bisnietos y en los tataranietos» (Éxodo 34: 6, 7).
«Escuchen y cumplan todo lo que les he ordenado, para que a ustedes y a sus hijos les vaya bien siempre, por hacer lo que es agradable y recto a los ojos del Señor su Dios» (Deuteronomio 12: 28).
«Así fue como murió Saúl a causa de su maldad, pues pecó al no obedecer las órdenes del Señor y al consultar a una adivina en vez de consultarlo a él. Por eso el Señor le quitó la vida, y le dio el reino a David, hijo de Isaí» (1 Crónicas 10: 13, 14).
«Pero el Espíritu dice claramente que en los últimos tiempos algunos renegarán de la fe, siguiendo a espíritus engañadores y enseñanzas que vienen de los demonios» (1 Timoteo 4: 1).
Identifica los pasos que llevaron a Saúl a su caída. ¿Qué podemos hacer hoy para evitar esa caída espiritual hacia la destrucción?
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Lección de Escuela Sabática Adventista para Jóvenes
4to. Trimestre 2015 «Biblia y Realidad»
Lecc. 6 – Adiós, Saúl
