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Experimenta: ¿Cuál personaje de la Biblia padeció halitosis?
Si tienes halitosis (mal aliento), tengo algunas ideas para combatirla: Lava bien tus dientes después de cada comida con un cepillo en buen estado
Pasa hilo dental entre tus dientes a diario. No imaginas los «tesoros malolientes» que puedes guardar durante meses entre los dientes y las encías.
Lávate la lengua. Es como un tapete viejo que acumula toda clase de materia olorosa. Cepíllala con cuidado, para no lastimarte.
Bebe agua natural varias veces al día. Una boca seca huele mal. Por eso al despertarte puedes hacer huir a cualquiera. Cuando bebas agua, pásala por toda tu boca, entrelos dientes y sobre tu lengua también.
Come o bebe menos azúcar. Las bacterias malolientes de tu boca la disfrtutan mucho.
Algunos medicamentos pueden causar mal aliento; pregunta a tu médico.
Masticar una hojita de menta puede ser de mucha ayuda.
Pide a tus padres que te lleven al médico si nada de lo anterior funciona. Podrías tener infecciones en amígdalas o garganta. La diabetes también produce un aliento desagradable, lo mismo que otras enfermedades.
Job padeció halitosis por la terrible lepra que el enemigo de Dios provocó en su cuerpo. Además perdió a todos sus hijos e hijas y quedó en la ruina. Satanás quería molestarlo para que enfureciera con Dios y dejara de alabarlo. Pero el malvado plan fue inútil. A pesar de las tragedias, Job nunca dejó de amar a Dios y alabar su nombre. Al final, Dios lo recompensó al darle el doble de todo lo que tuvo anterioremente. Por eso tú, a pesar de todo, alaba a Dios. No pongas pretextos. Que nada te impida amar a Dios con todas tus fuerzas.
«A mi esposa le da asco mi aliento; a mis hermanos les resulto repugnante» (Job 19:17, Nueva Versión Internacional)
Tomado de:
Lecturas Devocionales
para Menores 2015
“Ciencia divertida
para cada día”
Por: Yaqueline Tello Ayala
