Pensamientos de Paz
Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis. Jeremías 29:11.
Aprendemos a depender de Dios para todo cuando nos unirnos al ministerio de las publicaciones. Encontramos paz y gozo al aceptar la dirección de Dios y experimentar sus bendiciones y permanente cuidado. Mi esposa y yo recibimos muchas bendiciones en nuestras actividades de evangelismo, y 2011 fue un año especialmente bendecido. Ese año distribuimos más de 1.000 folletos y revistas y experimentamos muchas otras mercedes del Señor, incluyendo las que narro a continuación.
Uno de nuestros clientes, no adventista, compartió más de 100 folletos con las profecías de Daniel entre sus pacientes. En diciembre, distribuimos más de 20 colecciones de las lecciones de Daniel y Apocalipsis entre nuestros clientes, cinco copias de Conectándose con Jesús para familias, y más de 20 ejemplares de El camino a Cristo y Ley dominical nacional entre nuestros contactos. Vendimos libros por un valor superior a 1 millón de nairas (US$6.329) en solo seis meses: un éxito que nunca habíamos tenido antes, incluso en un año completo. En el Ministerio de la Prisión mi esposa pudo darles regalos a algunas convictas, además de folletos, que esperamos suplan sus necesidades físicas y espirituales.
En una de sus salidas, mi esposa entró a un negocio y conoció a un hombre que estaba cansado de la vida y pensaba que no había esperanza para él. No sabía qué hacer. Mientras hablaban, su corazón fue conmovido y el hombre se abrió y le contó las cosas que planeaba hacer. Le explicó que estaba tramando realizar un acto vil para enriquecerse, pero luego de hablar con ella, recapacitó y decidió abandonar esos planes. Dijo que había ganado una nueva esperanza y la visita lo había beneficiado enormemente. Es más, prometió visitar nuestra iglesia con nosotros. Antes de irse ese día, mi esposa le dio un ejemplar de El camino a Cristo para que leyera como una guía espiritual hasta que pudiera volver a visitarlo. Él es uno de los tantos que anhelan una palabra de ánimo y un toque humano.
Oramos por nuestros contactos diariamente y en sus testimonios vemos pruebas de que el Señor está contestando nuestras oraciones. Realmente podemos disfrutar de pensamientos de paz y gozo cuando aprendemos a depender de Dios para que nos prospere y nos dé esperanza y un futuro en su reino.
Goodluck Iroanya y Sra., Nigeria
Tomado de: Matinal para Colportores 2015
«Encuentros con la gracia de Dios»
Compilado por Howard Faigao
