Matinal Para Menores 2015 Para el: 10 julio
Experimenta: Toma alguna lata o envase de comida que haya en tu casa y revisa si en su lista de ingredientes menciona si contiene algún conservante.
Es buena costumbre leer las etiquetas de los productos que consumimos pero puedes llevarte sorpresas, agradables o desagradables. Los conservantes se agregan a algunos alimentos y bebidas para que demoren en echarse a perder. La lista es enorme. Además del ácido cíctrico, de origen natural, existen benzoatos, glutamatos, dióxido de azufre, epóxidos, propionatos, sorbatos, sulfitos, sulfatos, nitritos, nitratos, pirocarbonato de etilo, ácido málico, entre muchos. Si lees las etiquetas, es probable que encuentres más de uno de esos agresivos conservantes.
Algunas de las sustancias que conservan los alimentos en buenas condiciones también pueden producir enfermedades, como cáncer, asma, alergias y falta de oxígeno en el cerebro, si los consumimos con regularidad. Por esa razón, siempre que puedas, come alimentos naturales y libres de conservantes
Hace muchos años, Dios alimentó a su pueblo al hacer que cayera comida del cielo. Se la llamaba maná. La orden de Dios fue que de domingo a jueves los israelitas recogieran únicamente la cantidad que iban a comer. Si recogian de más, se pudría, porque no había cómo conservarlo.
El viernes de mañana recogían más y lo guardaban para el sábado. Ese día no caía comida del cielo, porque es el día de reposo que Dios escogió. Es un misterio increíble, pero sin agregar conservantes ni ponerlo en el refrigerador, el maná amanecía el sábado como si estuviera fresco. ¿Qué hacía que la comida del pueblo de Dios no se echara a perder del viernes para el sábado? Solo el poder divino, que también sirve para conservar alimentos.
Si obedeces las indicaciones de Dios, especialmente la de guardar el sábado, podrás experimentar milagros en tu vida, así como el que cada sábado presenciaba Israel al obedecer la orden de recoger doble mana el viernes.
«De acuerdo con la orden de Moisés, ellos guardaron para el día siguiente lo que les había sobrado, y no apestaba ni se llenó de gusanos» (Éxodo 16:24)
Tomado de:
Lecturas Devocionales
para Menores 2015
“Ciencia divertida
para cada día”
Por: Yaqueline Tello Ayala
Ene 13, 2025 0
Ene 13, 2025 0
Ene 13, 2025 0
Ene 13, 2025 0
Dic 30, 2015 0
Dic 29, 2015 0
Dic 28, 2015 0
Dic 27, 2015 0