«El pueblo santo de Dios debe ser paciente» (Apocalipsis 14: 12, PDT),
A los cachorros de león les encanta jugar. La leona permite que sus cachorros brinquen sobre ella. Mueve la cola para que los cachorros traten de atraparla y deja que se suban encima de ella. [Jueguen a esto en el piso. Imagine que su brazo es la cola.]
A veces los cachorros juegan bruscamente y la leona tiene que enseñarles respeto. Pero generalmente es paciente con ellos.
¿Por qué la mamá leona aguanta todo eso? Ella podría quitárselos de encima con sus garras. Se lo permite porque sabe que es importante. Cuando ellos saltan y pelean están aprendiendo a ser buenos cazadores. Ella tiene paciencia mientras ellos aprenden.
Pablo dice que la paciencia es uno de los frutos del Espíritu. El Espíritu Santo puede ayudarte a tener paciencia [Agregue el corazón con la palabra «Paciencia» al árbol,]
¿Te desesperan las personas que no comparten, que se quejan y que chismean? A veces hasta quisieras golpearlos. Pero no sería buena idea. Si los golpeas, ellos también querrán golpearte y empeorarías todo.
Es mejor ser paciente. El Espíritu Santo te ayudará, [Haga máscaras de león con los platos de papel. Jueguen a pelear, pero sin golpearse.]
Querido Jesús, ayúdame a aprender a ser paciente. Yo deseo
tu paz. Amén.
Materiales: Un corazón de papel con la palabra «Paciencia» escrita en él. Platos de papel, tijeras, cordel, pegamento y marcadores.
Actividad: Jugar como leones. Hacer máscaras de león.
Tomado de: Lecturas devocionales para los más pequeños 2014
“¿Qué dice Jesús?”
Rosanne C. Tetz
