Ya me han contado «le respondió Booz» todo lo que has hecho por tu suegra desde que murió tu esposo; cómo dejaste padre y madre, y la tierra donde naciste, y viniste a vivir con un pueblo que antes no conocías. ¡Que el Señor te recompense por lo que has hecho! Que el Señor, Dios de Israel, bajo cuyas alas has venido a refugiarte, te lo pague con creces. Rut 2:11, 12.
Booz trató a Rut como Cristo te trata a ti. La extranjera pobre, que no tenia nada para ofrecer; es elegida por el personaje rico, poderoso, que al final de la historia la libertará.
Booz actuó por amor. ¿Qué movió a Cristo a actuar de la manera en que actuó para con nosotros? Absolutamente nada más que amor.
Cuando leo la historia de Booz, me pregunto cuántas mujeres israelitas en Belén estarían dispuestas a casarse “de muy buen grado» con este hombre. ¿Era Rut tan bonita como para que la eligiera? La Biblia no dice nada, pero queda claro que desde el primer momento en el que la ve. Booz se interesa por ella. Dios también te mira con ojos especiales desde el primer minuto de tu existencia. Él ya sueña tu futuro, pero la decisión final es tuya, y Dios la respetará.
¿Ninguna mujer israelita trabajaba tanto como Rut? ¿Se interesó Booz por la fortaleza física o por la capacidad laboral que ella tenía? Si esa fuera la motivación, la hubiera elegido como trabajadora (para Rut ya sería una excelente opción de vida, para alguien que pensaba «casi» morir de hambre…), y no como esposa. Definitivamente, había algo más.
Lo que movió a nuestro Salvador no fue tu belleza, ni tu fuerza, ni tu capacidad, ni ninguna de tus cualidades, por muchas y bonitas que ellas sean. Él te eligió por algo más. Él te eligió porque te ama. No preguntes qué motivo tiene para amarte porque, como pecador, estás en una situación más vulnerable que la moabita pobre y desamparada que recogía las espigas que se les caían a los trabajadores.
Me podrás decir que te ama porque es tu Creador; casi como una obligación. Puedo aceptar la idea, aunque me gusta pensar que el Dios Todopoderoso eligió amarte. Eligió amarte sin importarle tu pasado, simplemente interesado en tu futuro de compañía eterna con él. Como Booz.
Tomado de: Lecturas devocionales para Jóvenes 2014 “365 Vidas” Por: Milton Betancor