lunes , 7 julio 2025
Inicio Matinal Para Adultos 2014 Dulce en la boca, pero amargo en el vientre
Matinal Para Adultos 2014

Dulce en la boca, pero amargo en el vientre

 

Entonces tomé el librito de la mano del ángel, y lo comí; y era dulce en mi boca como la miel, pero cuando lo hube comido, amargó mi vientre. Apocalipsis 10:10.

¡Y qué dulce que era!

Al escribir el 6 de octubre, el día que finalmente aceptó la fecha del 22 de octubre, Miller exclamó, en el artículo de tapa de The Midnight Cry [El clamor de medianoche] del 12 de octubre, “Veo una gloria en el séptimo mes que nunca antes vi. Aunque el Señor me había mostrado la relevancia típica del séptimo mes hace un año y medio [el artículo de mayo de 1843], sin embargo, no me di cuenta de la fuerza de los caracteres […]. Gracias al Señor, oh, mi alma. Benditos sean el hermano Snow, el hermano Storrs y los demás por su intervención para abrirme los ojos. Casi estoy en casa. ¡Gloria! ¡Gloria!! ¡Gloria!!! Veo que el tiempo es correcto […].

“Mi alma está tan llena que no puedo escribir […]. Veo que todavía estamos en lo correcto. La palabra de Dios es verdadera; y mi alma está llena de gozo; mi corazón está lleno de gratitud a Dios. Oh, cómo me gustaría poder gritar. Pero, gritaré cuando el ‘Rey de reyes venga’. Me parece oírte decir: ‘¡El hermano Miller no es un fanático!’ Muy bien, llámame como quieras; no me importa. Cristo vendrá en el séptimo mes, y nos bendecirá a todos. ¡Oh!, gloriosa esperanza. Entonces lo veré, y seré como él, y estaré con él por siempre. Sí, por siempre y siempre”.

¡No había nada más dulce que la esperanza de la pronta venida de Cristo!

¡Sin embargo, no regresó! Y el chasco fue amargo.

El 24 de octubre, el dirigente millerita Josiah Litch escribió a Miller y a Himes, desde Filadelfia, que “es un día oscuro aquí –las ovejas se dispersaron–, y el Señor aún no ha venido”.

Hiram Edson informó que “nuestras esperanzas y expectativas más preciadas fueron destruidas, y nos sobrevino un espíritu de llanto tan grande como nunca antes había experimentado. Parecía que no había punto de comparación por la pérdida de todos los amigos terrenales. Lloramos y lloramos, hasta el amanecer”.

Un joven predicador millerita, de nombre Jaime White, escribió: “El chasco, con el paso del tiempo, fue amargo. Los verdaderos creyentes habían sacrificado todo por Cristo, y habían compartido su presencia como nunca antes […]. El amor de Jesús llenaba cada alma […] y con un deseo inexpresable oraban: ‘Ven, Señor Jesús, y ven rápido’. Pero no vino. Y ahora, volver a los cuidados y las perplejidades de la vida, a la vista de las burlas y los denuestos de los incrédulos, que ahora se mofaban como nunca, fue una prueba terrible de fe y paciencia”.

La apertura del libro de Daniel por cierto había sido dulce en la boca, pero amarga en el vientre.

Tomado de: Lecturas devocionales para Adultos 2014
“A menos que Olvidemos”
Por: George R. Knight

Matinales relacionados

Las piedras viejas todavía hablan

Fue allí, en Gilgal, donde Josué apiló las doce piedras que había...

Y ¿qué sucedió con todos esos milleritas? -3

Sin profecía el pueblo se desenfrena; mas el que guarda la ley...

El porqué del éxito -8

Esto significa que el pueblo de Dios tiene que soportar la persecución...

El porqué del éxito -7

Adoren al que hizo los cielos, la tierra, el mar y todos...